El Belén tiene tres partes, que de derecha a izquierda representan tres momentos en la pareja José y María: En Nazaret, en Belén y en Egipto, de dimensiones parecidas. En cada descripción general pondré el esquema aplicable dibujado a mano, porque no se disponen de fotos del conjunto, probablemente porque no es factible con 30 metros de frente.
1ª parte: NAZARET:
Con unos escasos 100 habitantes. Se representan aquí las escenas previas al Nacimiento. Podéis reconocer:
En general un terreno árido, casas arracimadas, poca gente, miseria.
2ª parte: BELÉN:
Con el doble o triple de habitantes que Nazaret. Se representan aquí escenas que van de derecha a izquierda, como siempre en este Belén, desde:
Esta licencia geográfica es muy importante para el Belenista, pues permite representar y justificar en el Belén el río Jordán, nuestro famoso río del Belén (que queda a la izquierda del gráfico; no se ve en el dibujo, pero está en la realidad), en casi su sitio exacto, es decir bordeando Masada (un poco más arriba o más abajo). Una licencia afortunadísima, pues es realmente el único río de la zona. En realidad hay dos más, afluentes directos del Mar Muerto, pero su nombre no significan nada para nosotros. Tengo que decir que, por otro lado, tampoco Herodes estaba en Masada en aquellos tiempo en que recibió a los reyes Magos, si no en su Palacio de Jerusalén.
Los que hayan visitado Jerusalén probablemente han podido tener el mismo impacto visual, no en el templo, pero si en otras construcciones antiguas.
Los que viven en Madrid, y que me perdonen el resto, tienen el privilegio absolutamente desconocido, o casi desconocido, de tener una representación del templo de Jerusalén simbólica en el Jardín de las tres delicias, que está situado en el Parque Juan Carlos I. El simbolismo impera allí, pero el mármol de Jerusalén, blanco como la leche, allí está y rodea al templo que también está. En fin, pero esto es otro cantar que si interesa a alguien ya me lo dirá y tendré sumo gusto en documentarle.
3ª parte: EGIPTO:
Esta es la más original y espectacular. Sus dimensiones son exageradas y no guardan relación con la temporalidad de Jesús allí, pero sí es, era realmente, muy importante desde el punto de vista Judío y de ahí que el autor le diera esta importancia.
Los evangelios nos recuerdan como Jesús (descendiente de Moisés) también emigró a Egipto, como el Pueblo Judío en la época de los Hicsos, semitas como los judíos, que invadieron y sojuzgaron a Egipto durante tres siglos, más o menos. Que Moisés, redentor por excelencia (como Jesús) atravesó el desierto (como Jesús) y liberó a su pueblo al final de aquel período (como Jesús en el nuevo mensaje de amor que es el NT) y que llevo el Arca de Alianza (la virgen María) hasta Canaá, y que a diferencia de Moisés que pecó y se quedó a las puertas, Jesús si volvió y entró en Palestina., para liberar a su pueblo con la buena nueva. Los que rezan a la virgen sabrán que uno de los títulos de la virgen es precisamente “Arca de la Alianza”. Hay mucho escrito al respecto y el simbolismo es precioso. En nuestros Belenes, cuando ponemos la visita de María a su prima Isabel, estamos proclamando que María es el Arca de la Nueva Alianza, ya que el evangelista cita unos tiempos de permanencia en la visita, tres meses ¿recordáis? que a todo buen Judío la refería al traslado del Arca de la Alianza. Pero me estoy desviando ya que esto sería muy largo y no es el objetivo ahora.
Bien, pues por todo lo anterior es importante la representación de Egipto. No es trivial, el autor le ha dado la misma importancia que el evangelista, que en unas pocas líneas lanzó un mensaje subliminal a todos los lectores Judíos, de hondo calado. En el fondo no está muy claro si fue y volvió de Egipto; no es tampoco inverosímil ya que no se llevaban bien con Herodes en aquel momento, pero interesaba poner esto para todo el simbolismo que he explicado.
Y perdonad el rollo, pero era importante que supiéramos por qué se le está concediendo a Egipto una importancia tan desmesurada en este Belén.
Y volviendo a lo nuestro la parte de Egipto está dividida en otras tres y un fondo importante, como podéis ver en el dibujo:
Esta 3ª parte del Belén está conectada con la anterior de Belén y así vemos a la derecha el espolón de Masada y la desembocadura del río Jordán en el mar muerto, justo a la izquierda del espolón.
Y, justo a la izquierda de lo anterior, se encuentra la escena más bonita y novedosa a su vez del Belén de Bancaja, en mi opinión: el reposo de las sagrada familia en un oasis con su asno. Una verdadera obra de arte de Mayo por su expresividad. Y como es lo más bonito que ojos vieron, pues también la incluyo aquí de forma excepcional ya que tocaría en el monográfico, más adelante.